El jamón se disfruta a través de todos los sentidos. Por eso, su presentación visual debe acompañarlo, haciendo que su disfrute comience incluso antes del primer bocado. Desde la clásica tabla de jamón hasta platos originales que desafían la imaginación, hoy te descubrimos diversas maneras de presentar el jamón Legado Ibérico con la distinción que merece.
Tabla de jamón Legado Ibérico
La tabla de jamón es la forma más tradicional de presentar este producto. Las finas lonchas se disponen cuidadosamente sobre una tabla de madera o una fuente para la ocasión, dando ese lugar privilegiado en el centro de la mesa. Aunque puede acompañarse de queso, aceitunas o frutos secos, nuestra propuesta es darle ese papel principal al jamón, creando una tabla exclusiva para él.
Con picatostes o grissini
Para una presentación más informal, sirve el jamón Legado Ibérico con picatostes o grissini, su versión italiana más alargada. Estos palitos añaden una textura crujiente que contrasta con la suavidad del jamón, creando un equilibrio perfecto. Esta sencilla combinación simple es ideal para reuniones informales o picnics al aire libre.
En canapés variados
Los canapés son una forma original de presentar el jamón en tus celebraciones. Algunos de nuestros favoritos son mini tostas con queso de cabra y mermelada de higos, pequeños bocados con tomate cherry, o bolitas de melón envueltas en jamón. De este modo, se añade un toque de sofisticación y sabor a los platos.
Platos originales para presentar el jamón Legado Ibérico
Existen otras formas innovadoras de presentar el jamón, manteniendo a la vez el sabor del mismo en su esencia. Un ejemplo es el «carpaccio de jamón Legado Ibérico», donde finas lonchas de jamón se ponen sobre una cama de rúcula, con un toque de aceite de oliva virgen extra. Otra opción que siempre triunfa son las ensaladas con jamón, fruta, queso y frutos secos, creando una explosión de sabores. Esta presentación resalta la versatilidad del producto, ofreciendo una forma original de disfrutarlo.